NIELES-LOMA DE LOBRAZÁN-NIELES



Recorrido marcado en amarillo
(hoja 1042-II del Instituto Geográfico Nacional 1:25.000)

 
Se trata de un recorrido circular de aproximadamente 2 horas y 30 minutos, que transcurre hasta el Cortijo de los Arquillos por el sendero GR-142,  por  por lo que sus indicaciones en rojo y blanco nos servirán de guía para no perdernos. Comenzamos la andadura desde el lavadero, junto al cual podemos llenar nuestras cantimploras con la fresca y pura agua de su fuente. A continuación tomamos el camino de la era, la cual dejamos a nuestra derecha, para descender por un tramo muy deteriorado tras el que nos desviamos a la izquierda.

Vega de Nieles
Nos encontramos con las huertas, aún cultivadas por los habitantes de Nieles y regadas por numerosas acequias. Vemos las higueras, almendros, olivos, granados, moreras, el maíz, y los productos de la huerta: tomates, coles, pimientos, habichuelas, etc. Tras 25 minutos de descenso cruzamos el río Nieles y comenzamos a ascender por una vereda. Nos acompañan la jara, las gayumbas, el cantueso, la retama y el orégano, entre otras plantas. 5 minutos después de cruzar el río llegamos a un indicador de GR-142. Ante nosotros tenemos una amplia vista de Nieles con los bancales que se descuelgan hasta el río.

La vereda por la que ascendemos termina al llegar sobre un camino más amplio (en realidad es una acequia cementada), que nos da la opción de continuar a derecha o izquierda. Nosotros nos desviamos a la derecha, siguiendo la indicación del GR-142, y enseguida llegamos al Cortijo de los Arquillos, en el cual pararemos a contemplar las ruinas de un acueducto que pasaba por dicho cortijo.

Llevamos poco más de una hora de camino. En este punto retrocedemos sobre nuestros pasos y al llegar hasta el lugar en el que la vereda se une con la acequia entubada, dejaremos este camino para tomar otro que frente a nosotros asciende por una empinada cuesta hacia la cresta de la loma. Subimos por su cara sur. Mirando a la Sierra de la Contraviesa, vemos al fondo a nuestra izquierda La Sierra de Gádor y el Cerrajón de Murtas, al frente la Contraviesa, y a nuestra derecha la Sierra de Lújar. Enseguida comenzamos a crestear la loma. Estamos en tierra de secano y podemos ver algunas tierras abandonadas e invadidas por el monte bajo y los chaparros.

Tras caminar prácticamente por terreno llano y camino poco definido, disfrutando del paisaje, y antes de comenzar a descender, llegamos a un punto en el que la belleza de la panorámica bien merece unos minutos para su contemplación. Como si estuviéramos en la proa de un enorme barco, vemos a nuestro frente la aldea de Tímar, a nuestra izquierda Juviles, un poco más atrás nuestro querido Nieles, y a nuestra derecha, como en otro barco más pequeño, Lobras y las ya citadas Sierra de Gádor, Cerrajón, Contraviesa y Lújar.                                                                                         
Descendemos hasta una pista en la que nos encontramos un desvío: a la derecha vamos a Lobras, a la izquierda nuestro camino a Nieles. Hasta este punto hemos andado una hora y tres cuartos aproximadamente. Pronto llegaremos al puente sobre el río Nieles. Estamos sobre la nueva carretera de Nieles a Tímar, por la que continuaremos hasta llegar a Nieles. Allí, a la entrada del pueblo, en el bar-club del jubilado, podemos y debemos darnos el placer de tomar una refrescante y merecida cerveza, o un buen vaso de vino de la Contraviesa.